"Alejandro Valverde es una persona
querida por el pelotón pero le falta ser más respetado.
Debería tener un poquitín más de malicia”.
querida por el pelotón pero le falta ser más respetado.
Debería tener un poquitín más de malicia”.
El Movistar desea contratarlo, aunque tiene otras ofertas.
“Hay operaciones que te dan más prestigio que dinero”
“Mis nietos son primero del Real Murcia y luego de otros equipos. Para mí, mi profesión, el Real Murcia
y mi familia lo son todo”.
y mi familia lo son todo”.
Estará eternamente agradecido a su amigo, Pepe Pardo Cano.
¿El dinero da la felicidad? No, pero ayuda.
¿Ha sentido alguna vez impotencia? No. En algunos momentos he sentido indignación, malestar por alguna situación que he creído injusta. En los momentos más difíciles es cuando hay que sacar el carácter y la tranquilidad para afrontar las cosas.
¿La justicia es justa? La justicia creo que se acomoda a las circunstancias.
Sobre la mesa de su despacho. Subrayadas con fluorescente. Dos hojas. “Aquí tengo todos los partidos que dan por la tele en las próximas dos semanas”. Paco subraya los que no puede perderse. Paco Sánchez Sabater es, sobre todo, un hombre de fútbol.
Su vida no ha podido ser más intensa. Ha viajado por medio mundo. Ha compartido mesa con Alfonso Escamez, Vicente Calderón, Luis de Carlos, Pablo Porta, José María Del Nido, José Luis Núñez o Ladislao Kubala. Vocal, vicepresidente y director deportivo del Real Murcia. Posteriormente, agente de futbolistas. “En media hora cerré mi primera operación”. Paco fue el intermediario en la cesión de Frank Rijkaard del Ajax al Zaragoza. “Lo traje como jugador cedido en el invierno del 88 y luego participé en su traspaso al Milan”. Pagó la novatada. “Recuerdo que Berlusconi hacía poco que había comprado el Milan. Yo no sabía quién era aquel hombre e hice la gestión directamente con el dueño de los derechos del jugador y futuro Presidente del Sporting de Portugal (Jorge Gonsalvez). No nos pagó y perdimos un dineral impensable”. Aquella experiencia le enseñó algo. Comprendió la importancia que tiene estar bien informado y, también, que hay cosas mucho más importantes que el dinero y el prestigio. Nada le hace más feliz que llevar a sus dos nietos mayores a la Nueva Condomina. “Mis cuatro nietos son mi debilidad”. Paco no ha perdido lo más importante, la humildad que aprendió de sus padres, una pareja de agricultores de Cabezo de Torres. “Todos los días me acuerdo de ellos”.
¿Alguna vez ha deseado hacer algo y no ha podido? Aparentemente soy nervioso, pero la verdad es que soy un hombre que entiendo que a veces hay que conformarse. Creo que siempre quedan cosas por hacer, pero una virtud de las personas es saber conformarse y adaptarse a las circunstancias.
¿A cuántos jugadores representa? Llevamos un promedio de veintitantos a treinta jugadores. Me gusta involucrarme con el jugador, sea juvenil o consagrado. Conocerlo de pequeño y llevarlo hasta que se retire.
¿Cómo conoció a Valverde? Lo conozco desde que él tenía catorce o quince años. Su ex mujer, Ángela, es de mi pueblo. Venían muchos días a mi casa y le dábamos los recortes de prensa. Al tiempo, empezó a pedirnos consejo y hace cinco años, cuando terminó contrato con el Islas Baleares, me pidió que le representara. Rescindió contrato con sus agentes y desde entonces no nos hemos separado de Alejandro.
ALEJANDRO VALVERDE. Siente un gran afecto por él.
Con los años, Paco ha aprendido a separar lo personal de lo profesional. La peor cara del deporte es la hipocresía. “Los ciclistas necesitan hacerse respetar con un sindicato más fuerte, como en el fútbol. Valverde vivió un pulso con el CONI y sabíamos que tarde o temprano, por las circunstancias, iba a caer”. Alejandro Valverde está entrenando y preparándose como siempre. El Movistar desea contratarlo, aunque tiene otras ofertas. Indirectamente, Paco le da un consejo. “Alejandro Valverde es una persona querida por el pelotón pero le falta ser más respetado. Debería tener un poquitín más de malicia”. No es el único ciclista que frecuenta sus despachos. También representa a Juan José Cobo y hasta el pasado diciembre llevó a Luis León Sánchez.
¿Ha pasado muchas noches sin dormir? No. Yo tengo muy buen dormir.
¿Por qué se habla tanto de dopaje? Cuando se habla, supongo que lo habrá. Pero lógicamente habrá de todo, unos que sí y otros que no. Lo que es injusto es que cada uno juegue con armas diferentes. Que tomen todos lo mismo o que no tomen nada. De esta manera, los buenos seguirían siendo buenos.
¿Se está notando la crisis en su negocio? Sí. Se nota menos en los clubes grandes que en los pequeños. Hasta hace unos años, siete u ocho jugadores de Segunda B te daban ingresos. Eso ahora es impensable. ¿Cómo le voy a cobrar la comisión a un jugador de Segunda B que gana mil euros al mes? Si lo que tengo que hacer es dejarle dinero.
SU IMPERIO.
Lamenta no haber dedicado más tiempo a sus cinco hijos. “Este mundo requiere una gran dedicación”. Antes de ser padre, su mujer le acompañaba en algunos viajes. “La conocí una tarde de paseo por Churra, con diecisiete años. En aquella época para poder tocar la mano a una mujer tenía que ser tu novia”. Con el Sevilla ha hecho grandes negocios. Trajo a Iván Zamorano, Davor Suker y al seleccionador argentino, campeón del mundo, Carlos Salvador Bilardo, que fue técnico del Sevilla la temporada 92-93. Colaboró en la operación de Prosinecki por el Real Madrid y en el fichaje de Roberto Carlos, cuando llegó procedente del Inter al club merengue. “Hay operaciones que te dan más prestigio que dinero”. Tres de sus cinco hijos trabajan en el negocio (Antonio, José Alberto y Gonzalo). El imperio de Paco sigue creciendo. “Mis nietos son primero del Real Murcia y luego de otros equipos. Para mí, mi profesión, el Real Murcia y mi familia lo son todo”.
¿Le da tiempo a comerse las doce uvas? Nunca me ha dado tiempo a comérmelas seguidas.
¿Se arrepiente de algo? Me he equivocado muchas veces, pero es necesario equivocarse para aprender y no volver a cometer errores. Todos los días se aprende algo.
Habrá tenido poco tiempo para tomarse una cerveza y una marinera con sus amigos... He estado siete años en el Real Murcia. Los primeros años, hasta nos pagábamos nosotros los viajes. Le he entregado mucho al Real Murcia, pero gracias a este club he podido conocer el fútbol y vivir de él.
SU REAL MURCIA. José Pardo Cano, su ángel de la guarda
El fútbol es su pasión. Compaginó su negocio, una planta embotelladora de vinagres y aderezantes del limón, con su labor de directivo en el Real Murcia. Entró al club como vocal a finales del año 81, cuando Pepe Pardo Cano ocupaba la presidencia. “A los pocos meses, hizo una reestructuración y me colocó como vicepresidente deportivo”. El fútbol le ha dado muchas cosas pero, sobre todo, grandes amigos como Felipe Mesones y Pepe Pardo Cano, “un hombre con unos valores y unos conocimientos tremendos”.
Paco tiene un don. Es tremendamente intuitivo y Pepe Pardo Cano supo verlo. En su última etapa como presidente, la temporada 86-87, lo nombró director deportivo. Sanearon las cuentas del Real Murcia. Ágil, vendieron a Tendillo al Real Madrid por cien millones de las antiguas pesetas. Aquel año hubo elecciones (entonces no existían las sociedades anóminas en los clubes de fútbol) pero Pardo Cano tenía previsto dejar el club y no se presentó a las mismas. Él y todo su equipo, incluido Sánchez Sabater, pusieron fin a su etapa grana. "Supo irse en el momento adecuado. Con las cuentas saneadas y dejando al Real Murcia en su mejor clasificación en Primera”.
Entró de presidente Juan Garrido y decidió no contar con sus servicios. “Me encontré con cinco hijos y en la calle”. Al mismo tiempo que salió del Real Murcia, tuvo que liquidar su negocio. Fue la época "más difícil" que recuerda Paco. Pepe Pardo Cano se convirtió en su ángel de la guarda. Fue el que le animó a seguir en el mundo del fútbol. “Él, junto a otros amigos, me ofreció apoyo económico para que me manejara con total tranquilidad. Nunca hice uso de aquel dinero pero fue un gran respaldo moral. Les estaré eternamente agradecido”. En el 88, Paco empezó como agente de futbolistas.
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Paco Sánchez Sabater llevaba un cuerno en su mochila (dulce típico de Murcia) la primera vez que fue a la Vieja Condomina. Tenía siete años. El Real Murcia ganó tres a dos al Granada. Ese año, la temporada de Peiró, Collar, Marsal y Gallardo, el Murcia subió a Primera. Paco Sánchez Sabater tiene una memoria fotográfica. “Desde aquel día sólo me he perdido unos siete u ocho partidos del Murcia”. “Me acuerdo de todas las temporadas, de todos los jugadores y de sus características”.
Yo, inconformista de nacimiento, cuando salí de su despacho, después de una hora y media de entrevista, todavía me quedaba una duda. ¿Cómo sería aquella golosina? El cuerno, que tanto le gustaba a Paco. Lo más parecido a un cuerno que he encontrado de aquella época es esta imagen...
Para los despistados. Enlace 'Caso Valverde'.
De nuevo Ángela, impresionante. Me encanta la forma que tienes de hacer las entrevistas personales y a la vez informar de la actividad profesional del entrevistado. Nuevamente, mi más sincera felicitación.
ResponderEliminarimpresionado estoy, muy buena entrevista.
ResponderEliminarSaludos.
Un saludo desde Sevilla (y un sevillista) a este grandísimo profesional, que nos acordamos (los más veteranos) de él y de su aporte a favor del Sevilla FC. Que buenos momentos hemos tenido con gente como usted, como D. Rosendo Cabezas, D. Manuel Ruiz Vizcaíno... y no el "Orta" que tenemos ahora, que poco está aportando. Gracias y no cambie.
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